En la primera parte del estudio, su autor revisa someramente el marco jurídico-político que, a mediados de julio de 1988, se había dictado a propósito del próximo plebiscito. Además, allí se plantean las numerosas dudas que suscitaba la disposición transitoria vigésima séptima de la Constitución, norma que era la clave del proceso aludido. Concluía el profesor Cea que el plebiscito era crecientemente legítimo, aunque faltaba cumplir diversas exigencias para que alcanzara en plenitud el nivel de un veredicto ciudadano por entero democrático o democratizante. En la segunda parte, el autor ha actualizado la información suministrada con anterioridad, manteniéndola inalterada, a fin de que el lector capte mejor los avances efectuados en la materia hasta el 15 de septiembre del año en curso. Aunque subsisten algunos vacíos y defectos, el profesor Cea estima que, en definitiva, el comicio que se avecina sería democráticamente legítimo, con un resultado estrecho que, empero, puede ser holgado según cual sea la alternativa votada por la mayoría del alto porcentaje de ciudadanos indecisos.